Las manualidades siempre han sido entre otras cosas la asignatura estrella en cualquier colegio que se tercie, que levante la mano a quien no le gustaba cuando llegaba la hora mancharse las manos de temperas y hacer cosas chulas que luego llevábamos a casa y nos sentíamos orgullosos de ello. La verdad que en esos tiempos era una asignatura mucho más entregada, en la que en muchas ocasiones se hacían incluso obras de arte, para el regalo del día del padre o de la madre no se pensaba en comprar nada, sino que con el esfuerzo de todos los alumnos se conseguían hacer cosas que muchos padres y madres aún conservan y que se encuentran como el primer día. Menos mal que ha sido una práctica que no se ha dejado de utilizar en muchos de los colegios de este país, es más me atrevería a decir que incluso se ha puesto mucho más de moda si cabe, ya no en los colegios, sino en muchas casas españolas muchos padres lo han inculcado a sus hijos y han encontrado la manera de entretenerlos, incluso los mayores, muchos talleres que podemos encontrar en los que el entretenimiento es el plato estrella y donde se aprende hacer muchas cosas.
Es justo ahora cuando empezamos la cuenta atrás para que el día del padre llegue, y ya son muchas las personas que andan pensando en que poder regalarle y que sea original y bonito. La verdad que las madres en ese sentido tenemos el problema resuelto porque sabemos que en ole cole de neutros hijos el regalo va a estar preparado y no nos vamos a tener que quebrar los cascos pensando en que comprar. En cualquier caso siempre tenemos la posibilidad de hacerlo nosotros mismos en casa, tan solo es necesario contar con un sitio como mercamaterial.es donde poder comprar todo lo necesario para hacer un regalo bonito, lo bueno de sitios como este es que podemos encontrar muchas cosas originales con las que poder sorprender, fíjate que aún estás a tiempo entra y empieza a comprar ya antes de que empiecen agotarse, regalos así son los que más significado y valor suelen tener para los padres que los prefieren a que los niños compren cualquier tontería que después por desgracia se vea guardada en el fondo de un armario o cajón.